La tecnología en las manos de los niños.

En un mundo cada vez más marcado por la tecnología, es fácil encontrar niños que, con gran facilidad, navegan por Internet y usan smartphones o tablets. Pero esa inserción tan precoz en el mundo de la tecnología es beneficiosa para los pequeños? Bueno, una encuesta realizada por AVG Technologies en el año 2014 con familias de todo el mundo mostró que el 66% de los niños entre 3 y 5 años de edad podía usar juegos de ordenador, el 47% sabía cómo usar un smartphone, pero sólo el 14% capaz de atar los zapatos sola. En el caso de los niños brasileños, el levantamiento apuntó que el 97% de los niños entre 6 y 9 usan internet y el 54% tienen perfil en Facebook.
Aunque todavía no hay consenso entre los expertos, muchos apuntan consecuencias sombrías del contacto excesivo de los niños con las nuevas tecnologías. La terapeuta canadiense Cris Rowan, por ejemplo, sostiene que el uso de tecnología por menores de 12 años es perjudicial para el desarrollo y el aprendizaje infantil. Según ella, la sobreexposición del niño a aparatos tecnológicos está relacionada con el déficit de atención, los retrasos cognitivos, aprendizaje, impulsividad y problemas en el manejo de sentimientos como la rabia. Otros problemas comunes serían la obesidad (porque el niño hace menos actividad física), privación de sueño (cuando los niños usan las tecnologías dentro del cuarto) y el riesgo de dependencia por tecnología.
Debido a estos riesgos, en 2014 la Academia Americana de Pediatría y la Sociedad Canadiense de Pediatría recomendaron límites para la exposición de los niños a todo tipo de medios.
 Mayores de 2 años: Inicio del contacto con estos aparatos pero por tiempo limitado.
 Hasta 5 años: Mantente como máximo 1 hora delante de las pantallas.
 Entre 6 y 12 años: El tiempo aumenta a 2 horas.
 A partir de los 13 años: El tiempo debe ser de 3 horas.
Pero, incluso con tantas recomendaciones, muchos padres parecen no preocuparse por el asunto. Bajo la justificación de que hoy es importante saber trabajar con las nuevas tecnologías desde temprano o simplemente para evitar molestias, los padres acaban dejando a los niños libres para usar los equipos de la forma que quieran, lo que puede causar problemas no sólo a los pequeños, pero para toda la familia.
"Necesitamos encontrar una manera de educar a los padres de hoy, y también a los futuros padres, sobre los daños y beneficios de los medios electrónicos y ayudarles a tomar decisiones positivas para sus hijos", alerta Susan Linn, escritora y cofundadora de la organización estadounidense Coalición por el fin de la explotación comercial infantil.

  Escrito por:                                                       João Lucas e Gabriel Bomfim.